Reflexiones de un blogger

Llevo tiempo queriendo hablaros de algo. Como habréis notado, me paso menos por aquí ultimamente. Esto se debe principalmente a dos razones: 1) Que estoy más ocupado, sobre todo por el tema del teatro. 2) Que no encuentro motivación para escribir en este blog.

No me entendáis mal, me alegra ver que entráis por aquí (muchos/as diariamente), pero me entristece ver que nadie nunca dice nada sobre lo que escribo. Creedme que es muy desmotivador hacer un trabajo para los demás y que nadie se moleste en comentar algún post que le haya gustado, o incluso que no, que de su opinión sobre un tema... Comprendo que haya temas que no os despierten interés, pero supongo que si os pasáis a menudo es porque algunas cosas os gustarán... Cambié la estructura del blog, entre otras cosas, para hacer más fácil que pudiérais dejar vuestras impresiones, pero ni por esas. Además, mi idea era escribir menos para poder escribir casi a diário. Pero con esta respuesta es imposible... Con 4 años recién cumplidos, observo día tras día como casi todos los post siguen con 0 comentarios ( y porque la única que escribe de vez en cuando es mi pareja Olga...). Incluso algunas veces me pregunto si hay alguien ahí detras leyendo... En fin, que todo esto es para deciros que si la cosa no cambia un poco este blog acabará muriendo. Si os gusta lo que hago, es el momento de demostrarlo. Sigo pensando que vosotros enriquecéis el blog. De hecho, estoy harto de ver como funcionan y se mantienen los blogs que son seguidos y comentados, y mueren los que apenas tienen comentarios. Es así. En vuestra mano está seguir con esta aventura...