sábado, 7 de mayo de 2011

Thor


¿A qué debe aspirar un cineasta, a realizar la mejor película posible, o a ir a lo seguro que sabe que va a funcionar, sin pretender ir más allá? Supongo que las respuestas a esta pregunta serán muy diversas, tantas como personas que acudirán al cine a ver "Thor". Unos pensarán que es un film muy correcto, entretenido, que les ha hecho pasar un buen rato y no le pedirán más. Incluso no querrían que les complicaran la historia. Simplemente desean ver una peli típica de superhéroes, con sus luchas, dilemas y grandes efectos especiales. Sin embargo, hay otros que creemos que siempre se puede aspirar a más, que un director no debe conformarse con hacer una cinta correcta. Cuando supe que el afamado director Kenneth Branagh, especialista en adaptar obras de Shakespeare al cine, iba a dirigir "Thor", salté de alegría. Era el director ideal para esta obra de tintes shakesperianos, donde se narran historias familiares de traición y venganza. Pero lo que ha ocurrido es que Branagh ha ido a lo fácil, y ha hecho una estupenda peli de entretenimiento, pero en mi opinión no ha aprovechado el magnífico material del que disponía para hacer algo más trascendental e intenso, algo que sí supo hacer, por ejemplo, Nolan en "El Caballero Oscuro". Supongo que es lo que hay ultimamente. Y no es que el film no me haya gustado, todo lo contrario, pero será una película más de superhéroes... Por cierto, estoy harto del 3-D.

Nota: 7

No hay comentarios:

Publicar un comentario